Esta semana he vuelto y no ha sido fácil. Sigo en medio de un cúmulo de cajas por todas las habitaciones, de cosas por montar y otras por desmontar. De papeles y recuerdos y de una limpieza que nunca acaba.
Pero también ha sido una semana de volver a leer y parar. Parar un poco de esta vida de locos que llevamos todos y no nos da tregua. Así que me he permitido el lujo, digamos que ya es un lujo, de volverme loca en instagram, en las revistas de moda y en internet, a ver que estaba pasando por el mundo y me estaba perdiendo.
Y he visto que una de las actrices con las que más me rio sin parar en Moderna Family por ese acento mexicano que tiene cuando habla en ingles, si, todos sabemos ya que es Sofia Vergara, se ha casado a lo grande, con un vestido que da mucho que hablar y una tarta que todavía hoy no se como calificar.
He descubierto que rectificar es de sabios. Juré y perjuré que jamás volvería a probar una tortilla de patata precocinada pero fue probar las tortillas de la marca Senen y cambié de opinión inmediatamente. Están buenísimas!!
Ayer fue la presentación del libro de Andrea Amoretti pero lamentablemente no pude asistir. Uno de los blogs responsables de esta vuelta repentina, por su cuidado, sus lecciones de estilo, y su belleza. Ella es encantadora, parece simpatiquísima y todo un ejemplo a seguir.
Por fin probé la marca de cosméticos Nars. Compré los imprescindibles, el lapiz de labios Dragon Girl y el colorete Orgasm y no defraudan en absoluto (ya contaré más detalladamente la buenísima experiencia de compra en su stand de El Corte Inglés).
Feliz Puente!
No hay comentarios